¡Wow! Tatuajes... ¿Estás seguro(a)?

Si por tu mente no pasa otra cosa que el famoso “quiero rayarme”, te invito a conocer a fondo lo que estás a punto de hacer, para que después no te vayas a arrepentir... 

!Wow! Un tatuaje es cosa de pensarse. Me podrás decir que “son sexys”; que “están de moda” y que además “son únicos porque no hay uno igual a otro”; que “es tuyo y de nadie más” ... Pero, sabes ¿qué es?, ¿cómo se hace?, ¿qué peligros conlleva?, ¿su historia?, ¿cuántos tipos hay? Si por tu mente no pasa otra cosa que el famoso “quiero rayarme”, te invito a conocer a fondo lo que estás a punto de hacer, para que después no te vayas a arrepentir...

Érase que Era…

Hablar de la historia del tatuaje, desde su nacimiento hasta la actualidad, es complicado. De lo que sí podemos estar seguros es que existió en la mayoría de las civilizaciones del mundo antiguo; lo que quiere decir, que tiene casi la misma edad que el hombre.

El primer testimonio conocido del tatuaje lo encontramos en el famoso “hombre de hielo”, descubierto en los Alpes Suizos en 1991. En su momia se hallaron varios tatuajes en forma de líneas y de una cruz. Pero estos coinciden en zonas afectadas por la artrosis; por lo que se cree que el tatuaje en un primer momento fue utilizado como medio de curación.

En Egipto se encuentran tatuajes en las momias cuyo carácter es religioso. Al parecer, éste estaba destinado a las personalidades importantes de ese gran reino. A lo largo de los últimos siglos ya tenemos constancias escritas sobre el tatuaje. Desde los primeros que se tatuaban símbolos con los que afirmaban pertenencia al grupo, hasta los cruzados y peregrinos a Tierra Santa que marcaban sus cuerpos con dibujos que simbolizaban sus viajes y devoción.

A partir del siglo XVIII el grupo más activo eran los marineros. Hasta 1891 los tatuajes se realizaban a mano; momento en que Samuel O’Reilly, patenta la primera máquina eléctrica llamada a revolucionar el mundo del tatuaje. Ya en el siglo XX el tatuaje se relacionó con algo turbio y se le asoció con las clases marginales. En los 80, lo empiezan a utilizar los grupos punks, heavies y rockers. Pero en los 90, fue el despliegue definitivo.

De todos los Sabores y Colores. He aquí una lista de los estilos más conocidos y en qué consiste su diseño. * Biomecánico: figuras referentes a ciencia ficción; partes mecánicas y componentes   electrónicos. * Céltico: estilo tribal, motivos geométricos, nudos, lazos, animales y piedras preciosas.* A color: pueden ser de cualquier color, pero por lo general éste se difumina con el tiempo.* Tradicionales: de toda la vida; desde los temas marineros y animales. Existen todas las     posibilidades. * Sombras difuminadas. * Estilo japonés: dragones, carpas, flores, colores, sombras; estos se caracterizan por tener volumen. * Retratos: por lo general son en blanco y negro y se utilizan fotografías de personajes reales.

¿Tatuarte?

Cuando decimos que un tatuaje es para toda la vida, créeme que no estamos exagerando, ¡es verdad! Aunque existen métodos que permiten eliminar un tatuaje, la experiencia dice que la decisión de quitarse un tatuaje es muchísimo más difícil que la de hacértelo. Una vez que vas a la clínica a preguntar el precio, la decisión es más complicada todavía, ¡créelo!

Lo que debes saber.

Aquí te damos a conocer algunos términos que debes de conocer si por tu cabeza cruza la idea de tatuarte:

 Aguja: es el instrumento fundamental para hacer un tatuaje. Su misión es implantar la tinta bajo la  piel para dar forma. Para ello se acopla a una máquina eléctrica que la hace vibrar a más de 1,000  impulsos por minuto.

Las agujas deben de ser siempre nuevas para cada cliente y estar súper estilizadas. Hay diversos tipos de agujas: para perfilar y rellenar.

 Dolor: la vibración de la aguja es molesta y puede doler no mucho, muchísimo; sobre todo cuando  lleva cierto tiempo sobre tu piel. Cuentan que algunas partes del cuerpo pueden reaccionar de  diferente manera.

 Henna: es un pigmento originario de las culturas africanas, que se usa para pintar “tatuajes  temporales” que sólo duran unos días, hasta que se borran por sí mismos. No entrañan peligro alguno  ni requieren muchos cuidados. Es una opción sencilla y barata para probar qué tal te sentirías con  algo permanente en tu cuerpo.

Tiene un parentesco relativo con el tatuaje y es una opción sencilla, barata, no duele y si te arrepientes ¡Gracias a Dios, se borra!

Si ya te decidiste, ¿Sabías Que...?

El tatuaje recién hecho es una herida en la piel. Durante las 3 o 4 primeras horas debe ir vendado. A partir de ahí, es importante llevarlo descubierto el mayor tiempo posible para ayudar a su cicatrización.

Las dos primeras semanas son cruciales para la perfecta fijación del tatuaje: se debe evitar el sol, agua de mar o alberca, el alcohol o el perfume; debes llevar una dieta balanceada evitando comer ciertos alimentos que pueden evitar la cicatrización. Es importante lavar el tatuaje y aplicar crema cicatrizante; ¡así que prepárate a invertirle unos 15 minutos diarios a su cuidado! Durante este tiempo, es del todo normal que la piel empiece a pelarse, que el tatuaje pique o que aparezcan costras. De 10 a 15 días dura la curación.

Si te Arrepientes de Tener Uno. El láser borra el tatuaje, pero deja marcas en forma de piel decolorada o cicatrices. Es mejor prevenir que lamentar, ¿no crees?

¡Cuidado!
Ningún tatuador que se precie de serlo y sea confiable, hará un trabajo a un menor de 18 años. Tampoco en la cara, manos ni genitales. Debes de tener mucho cuidado al elegir a la persona que te hará el tatuaje. Las agujas utilizadas deben ser nuevas ya que, si se utilizan algunas usadas, estás en riesgo de contagiarte de alguna enfermedad, de contraer Sida o quedar muy lastimado(a) de la piel.

Te recomendamos que por ningún motivo te lo vayas a hacer a escondidas; primero habla con tus papás al respecto. No lo hagas por imitación, moda o capricho, es tu decisión, es tu cuerpo, pero antes de hacerlo, piénsalo. Muy pero Muy Pronto.

Por: Carmen Kern