Los 6 principios cristianos para manejar el dinero como a Dios le gusta
y dando fruto abundante.
Hay principios morales
referidos al dinero que no son necesariamente cristianos, sino que cualquier
pagano o ateo honrado los practica: pagar un precio justo, no robar, no
estafar, cumplir con los deberes fiscales, tener prudencia en los gastos, no
despilfarrar…
Frente a eso, hay un enfoque específicamente cristiano, que considera que el dinero –y
todos los otros recursos, talentos y riquezas- están al servicio de Dios
la expansión del Reino de Dios (un "reino" que la Biblia define como
“justicia, paz y el gozo del Espíritu”).
En el Encuentro de Nueva Evangelización ENE 2015 de Astorga, el
responsable de economía de la comunidad Fe y Vida, Jairo Alonso, dirigió un
taller explorando estos principios cristianos aplicados al dinero. Fe y Vida
(feyvida.com) es una comunidad católica de laicos y familias cuyos miembros
pagan un diezmo (habitualmente –pero no siempre- un 10% de su sueldo) para las
actividades solidarias, misioneras y evangelizadoras de la comunidad, lo que
permite manejar una cierta cantidad de dinero “para el Reino” y hablar del tema
con conocimiento de causa.
Esto es para cristianos convertidos
Jairo Alonso empezó su exposición dejando claro que estas ideas son para cristianos “convertidos”, maduros, que son aquellos que han dicho a Dios “toma mi vida, y mis cosas y haz lo que quieras con ellas, dirígelas”. No son para neófitos. Un primer elemento a tener en cuenta es que la lógica de un mundo caído y de unos seres humanos temerosos no es la lógica de Dios y de los hijos de Dios transformados por Él. Jairo Alonso apuntó que el hombre, sintiéndose más frágil que muchos animales, intenta sentirse seguro rodeándose de cosas y dinero como protección. Además, entre las distintas culturas humanas, la del Occidente moderno es especialmente dada a alentar el consumismo.
Jairo Alonso empezó su exposición dejando claro que estas ideas son para cristianos “convertidos”, maduros, que son aquellos que han dicho a Dios “toma mi vida, y mis cosas y haz lo que quieras con ellas, dirígelas”. No son para neófitos. Un primer elemento a tener en cuenta es que la lógica de un mundo caído y de unos seres humanos temerosos no es la lógica de Dios y de los hijos de Dios transformados por Él. Jairo Alonso apuntó que el hombre, sintiéndose más frágil que muchos animales, intenta sentirse seguro rodeándose de cosas y dinero como protección. Además, entre las distintas culturas humanas, la del Occidente moderno es especialmente dada a alentar el consumismo.
Para dejar claro que la sabiduría del Evangelio
chocará con la lógica mundana, Jairo dio una lista de ejemplos.
El mundo grita: “busca
seguridad”. Jesús dice: “fíate”.
El mundo dice: “ten, acapara”. Jesús dice: “da”.
El mundo dice: “acumula poder”. Jesús, dice: “sé servidor, los últimos serán los primeros”.
El mundo dice: “consume placer”, Jesús dice: “estad alegres, tened gozo en vuestro corazón”.
El mundo dice: “lo que importa es el ahora”. Jesús dice: “guarda riquezas en la vida eterna”.
El mundo dice: “ten, acapara”. Jesús dice: “da”.
El mundo dice: “acumula poder”. Jesús, dice: “sé servidor, los últimos serán los primeros”.
El mundo dice: “consume placer”, Jesús dice: “estad alegres, tened gozo en vuestro corazón”.
El mundo dice: “lo que importa es el ahora”. Jesús dice: “guarda riquezas en la vida eterna”.
Un criterio básico para vivir como cristiano está en la Biblia en
Romanos 12: “No viváis según los criterios del tiempo presente, sino según la
voluntad de Dios, según lo bueno, lo grato, lo perfecto”.
La vida económica
del cristiano es distinta
Un cristiano, por lo tanto, no puede vivir igual que vive un pagano, ni siquiera como un pagano virtuoso u honrado. La vida económica del cristiano ha de ser distinta a la del mundano.
Un cristiano, por lo tanto, no puede vivir igual que vive un pagano, ni siquiera como un pagano virtuoso u honrado. La vida económica del cristiano ha de ser distinta a la del mundano.
Fuente: Religión en Libertad
No hay comentarios.:
Publicar un comentario